En la actualidad, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) de la República Dominicana ha generado debates acerca de su verdadera naturaleza y a quién representa.
Algunos argumentan que el PRM es un partido conformado por aquellos que abandonaron el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), mientras que otros sostienen que el PRM es más bien un instrumento de los empresarios para asegurar el control del presupuesto nacional.
Este artículo analizará estas afirmaciones y explorará la relación entre el PRM y el sector empresarial dominicano.
Es cierto que el PRM surgió de una escisión del PRD, con la salida de varios políticos destacados, como Hugo Tolentino Dipp, Ramón Alburquerque y Guido Gómez Mazara entre otros.
Sin embargo, según algunos críticos, esta ruptura fue aprovechada por los empresarios para crear un partido que sirviera a sus intereses y les permitiera acceder directamente al poder y al presupuesto nacional.
El hecho de que el PRM se maneje de manera similar a una empresa privada ha llevado a algunos a cuestionar sus verdaderas intenciones.
A diferencia de otros partidos políticos, el PRM ha implementado primarias internas para elegir a su candidato presidencial, lo cual ha sido interpretado como una estrategia para garantizar que solo aquellos que se alineen con los intereses de la élite empresarial lleguen a ocupar cargos de poder.
Sin embargo, en los niveles compresionales y municipales, se ha anunciado el uso de métodos diferentes, lo que ha generado suspicacias sobre posibles mecanismos para evitar la participación y las consideraciones de las bases.
Aunque el PRM se originó a partir de la salida de políticos del PRD, algunos sostienen que se ha convertido en un instrumento de los empresarios para controlar el presupuesto nacional sin intermediarios.
La forma en que se ha estructurado y el énfasis en la alineación con la línea de Luis Abinader han llevado a afirmaciones de que el PRM no representa los intereses ni la ideología de figuras históricas como José Francisco Peña Gómez, ni tampoco el interés nacional en general.
Es fundamental continuar analizando y debatiendo sobre la naturaleza y el funcionamiento de los partidos políticos en la República Dominicana para comprender mejor cómo se toman las decisiones y se defienden los intereses en el ámbito político y económico.
Luego leer este artículo vas a entender muchas cosas como:
El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha implementado una política económica centrada en lo que se ha denominado como una «alianza pública-privada» durante la gestión del presidente Luis Abinader en la República Dominicana.
Sin embargo, esta estrategia ha generado interrogantes sobre el papel de las bases del PRM y el grado de exclusión en la toma de decisiones. Este artículo examinará cómo esta política económica refleja un enfoque elitista y cómo la composición del gobierno de Abinader ha influido en esta dinámica.
La política económica del PRM, bajo la administración de Luis Abinader, ha puesto un fuerte énfasis en la alianza entre el sector público y privado.
Si bien esta estrategia puede tener sus beneficios en términos de atracción de inversión y desarrollo económico, algunos críticos argumentan que ha excluido a las bases del partido y ha favorecido a las élites empresariales.
Una evidencia de esta situación se encuentra en la composición del gobierno de Abinader. Se ha observado que la mayoría de los funcionarios nombrados provienen del sector empresarial o tienen un perfil asociado a la clase alta.
Esto ha generado críticas sobre el clasismo que prevalece en la cúpula del PRM y plantea interrogantes sobre la representación de los sectores populares en la toma de decisiones.
Además, se ha notado que la influencia de funcionarios provenientes de sectores populares es limitada y, en su mayoría, ocupan puestos de menor jerarquía. Esto sugiere que su inclusión puede ser más simbólica que efectiva, ya que no tienen un impacto significativo en la definición de políticas y programas económicos.
¿SUBSCRÍBETE EN NUESTRO CANAL DE YOUTUBE, LO CONOCES?
La gestión del PRM, ha planteado preocupaciones sobre la falta de participación de las bases y el predominio de élites empresariales en la toma de decisiones. El hecho de que la mayoría de los funcionarios nombrados por el presidente Abinader provengan del sector empresarial o tengan perfiles asociados a la clase alta refuerza estas inquietudes.
Es esencial promover un análisis crítico y una mayor inclusión de las bases en la formulación de políticas, con el objetivo de garantizar que los intereses y necesidades de todos los sectores de la sociedad dominicana sean tenidos en cuenta. La transparencia y la diversidad en la representación política son elementos fundamentales para fortalecer la democracia y lograr un desarrollo equitativo y sostenible.
Si te pareció interesante, compártelo con tus amigos.
Te dejamos nuestros más reciente análisis: Si las elecciones municipales fueran hoy, el PRM pierde la alcaldía de SDE con cualquier candidato..