La República Dominicana es una nación bendecida con una abundancia de recursos naturales: oro, plata, piedras semipreciosas y, más recientemente, el potencial de tierras raras. Sin embargo, la explotación de estos recursos ha sido históricamente controlada por intereses extranjeros, con la complicidad de una élite política local, dejando al pueblo dominicano al margen de los beneficios que legítimamente le corresponden.
Explotación de Recursos y Beneficios para Extranjeros
Empresas multinacionales han dominado la extracción de minerales en el país. Por ejemplo, la explotación de oro y plata ha estado en manos de corporaciones extranjeras, mientras que el larimar, una piedra semipreciosa exclusiva de la República Dominicana, también se destina principalmente a mercados internacionales. Estas actividades generan enormes ganancias que rara vez se reflejan en mejoras significativas para la población local.
Inversión Extranjera Directa y su Impacto
Según un informe de la Asociación de Inversiones Extranjeras (ASIEX), en 2015, mientras el déficit de cuenta corriente del país fue de US$1,280 millones, la cuenta corriente de la inversión extranjera fue positiva en US$3,095 millones. Esto indica que, aunque la inversión extranjera aporta divisas, los beneficios reales para la economía local y la distribución equitativa de estas riquezas son cuestionables.
Políticas y Realidad
La Constitución dominicana establece que los beneficios percibidos por el Estado por la explotación de los recursos naturales deben ser dedicados al desarrollo de la nación y de las provincias donde se encuentran. Sin embargo, en la práctica, estos beneficios no se traducen en mejoras tangibles para las comunidades afectadas por la minería y otras actividades extractivas.
Impacto Ambiental y Social
La sobreexplotación de los recursos naturales ha tenido consecuencias devastadoras para el medio ambiente y las comunidades locales. La deforestación, la contaminación de fuentes de agua y la degradación de suelos son problemas recurrentes que afectan la calidad de vida de los dominicanos y ponen en riesgo la sostenibilidad de los ecosistemas.
El turismo y las remesas
Aunque el turismo representa una fuente significativa de ingresos para la República Dominicana, aportando más del 20% del total de divisas que ingresan al país, es crucial analizar cómo se distribuyen estos beneficios y si realmente impactan de manera positiva en la economía local.
Un aspecto preocupante es que una parte considerable de los ingresos generados por el turismo no permanece en la economía dominicana. Las reservas y pagos realizados a través de agencias de viajes y plataformas internacionales a menudo no ingresan directamente al país, lo que reduce el flujo de divisas que podría beneficiar a la economía local.
Además, muchas de las grandes cadenas hoteleras y operadores turísticos que operan en el país son de origen extranjero, lo que implica que una porción significativa de las ganancias se repatría a sus países de origen, limitando aún más el impacto económico positivo en las comunidades locales.
Esta situación se ve agravada por el hecho de que, aunque el turismo y las remesas constituyen el 53.5% del total de ingresos por divisas del país las comunidades locales a menudo no experimentan mejoras significativas en su calidad de vida. La dependencia de estos sectores puede plantear retos, ya que el país se vuelve más dependiente de los ingresos externos en lugar de fomentar la producción y exportación local.
Es imperativo que se implementen políticas que promuevan una mayor participación de empresas locales en la industria turística y que se asegure una distribución más equitativa de los ingresos generados. Solo así el turismo podrá convertirse en una verdadera palanca de desarrollo sostenible para la República Dominicana, beneficiando a toda la población y no solo a un pequeño grupo de actores nacionales y extranjeros.
Es imperativo que el pueblo dominicano tome conciencia de esta realidad y exija una gestión más transparente y equitativa de sus recursos naturales. La riqueza del país debe servir para mejorar las condiciones de vida de todos los dominicanos, no para enriquecer a unos pocos y a intereses extranjeros. Solo a través de una ciudadanía informada y activa se podrá lograr un cambio que garantice un futuro más justo y sostenible para la República Dominicana.
No te olvides de crear tu perfil en HES Social para que puedas comentar cualquier noticia, subir tus denuncias y compartir tus opiniones con la comunidad.

Si te parece interesante este articulo, difúndelo con tus amigos.
Te dejamos nuestros más reciente análisis: ¡Traición a la Patria! Los Periodistas que Vendieron su Voz por Dinero a la USAID